Qué síndrome es ese que en el día quién sabe cuál de la cuarentena los malestares, más emocionales que físicos, se vuelven difíciles de ocultar
MUJER CONECTADA
Claudia Castro
En el día quién sabe cuál de la cuarentena, los malestares más emocionales que físicos se han vuelto más difíciles de ocultar.
Las redes sociales evidencian el hartazgo, cansancio y depresión que se han generado entre los mexicanos conforme se ha recrudecido la pandemia.
Y aunado a lo que significa el propio encierro y cambio de rutinas, las mujeres estamos experimentando en el límite de lo que por ocasiones pareciera soportable, el llamado Síndrome de Burnout.
Se le conoce así a un padecimiento de los últimos años que presentan las personas que padecen un estrés muy agudo o crónico que se genera cuando se tiene la sensación de que todo desborda, de que todo se hace mal y de que no se tiene el control de nada.
En el caso de las mamás, esta condición se agrava dadas las múltiples responsabilidades que llevamos a cuestas y que en esta cuarentena han dejado poco o nulo margen de maniobra para tener espacios de esparcimiento que permitan liberar ese estrés.
Sandra Guzmán, de 40 años, es una contadora que tiene su propio despacho y desde hace 2 meses se mantiene en confinamiento junto a su hijo con Síndrome de Down de 10 años.
Para ella la situación “se ha vuelto agotadora y por momentos insoportable”.
Y no es que no quiera convivir con su hijo, es que aunado a ello, debe seguir atendiendo a sus clientes, presentar sus declaraciones que precisamente se atravesaron en marzo y abril, liderar un equipo de 10 personas que trabajan en su despacho y que ahora todos se mantienen conectados haciendo home-office.
Por si fuera poco debe ocuparse de las labores del hogar, hacer la comida, mantener la casa medianamente ordenada, meter ropa a la lavadora, entre muchas otras actividades esenciales para que las cosas mantengan su curso.
Como Sandra, las mamás en México se enfrentan a uno de los momentos de mayor agotamiento.
Día a día las cargas de trabajo continúan y no hay días de descanso.
La causa principal del Síndrome de Burnout es el estrés que genera el querer compaginar diferentes aspectos de nuestra vida y la frustración que genera no lograrlo de acuerdo a nuestras propias expectativas.
¿Cómo sé si lo padezco?
¿Cómo saber si estás experimentando los síntomas de este síndrome?
Se manifiesta a través de diferentes formas, como dolores de cabeza recurrentes, insomnio, fatiga intensa y dificultades gastrointestinales.
También se acompaña con algunos síntomas emocionales, como la ansiedad, depresión, irritabilidad y distanciamiento afectivo.
La persona con Síndrome de Burnout se siente agobiada y cansada. Experimenta un intenso sentimiento de impotencia y desesperación desde que comienza el día.
Si no se trata, la persona termina sufriendo anhedonia, es decir que se pierde la capacidad de disfrutar.
¿Qué hacer?
Creo que hoy más que nunca tenemos que soltar el control y establecer prioridades.
Tenemos claro que no podemos con toda la carga que llevamos a cuestas, así que debemos soltar, delegar y pedir ayuda.
Quiero insistir en que si nosotras no estamos bien, ni nuestra familia ni nuestro entorno lo van a estar.
Tenemos que trabajar en estar bien nosotras mismas.
Ya bastante tenemos con lidiar con el simple hecho de estar en medio de una pandemia, como para que encima queramos que todo alrededor tenga que estar perfecto.
La prioridad es nuestra salud, física y emocional, la de los nuestros y después las tareas o tener la casa limpia.
Y si sentimos que la carga es enorme y no encontramos la forma de sobre llevarla, no solamente es válido, sino necesario pedir ayuda profesional.
Vamos a salir de ésta, sin duda, pero necesitamos enfocarnos en lo más importante, un día a la vez.
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- *Periodista, especializada en temas financieros y maternidad. Mamá convencida de que el cambio social empieza con nosotras y nuestros hijos.
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